✿La Laguna de Paca✿
Cuenta que Dios bajó a la antigua ciudad de Jauja con la intención de darle una lección a sus pobladores por su avaricia y egoísmo, Dios bajo sin embargo convertido en un anciano pobre. Recorrió las casas de la ciudad pidiendo algo de ayuda, pero solo recibió insulto de la gente diciendo: “¡Fuera viejo!”, le decían los pobladores mientras bebían y se burlaban. Para él resultaba incomprensible que ninguno de ellos, a pesar de sus riquezas, le brindara ayuda.
Cuando llegó a la casa más humilde, tocó la puerta, y fue recibido por una mujer que lo invitó a pasar. Una vez dentro, le dio pan y agua. Tras haberse alimentado, le pidió a la mujer una flor que olió profundamente y le dijo: “En agradecimiento a tu bondad, mujer, saldrás con tus hijos de este pueblo y subirás el cerro. Escucharás gritos y lamentos que no podrás ignorar, pero no voltees atrás y sigue tu camino”
La mujer salió inmediatamente junto a sus hijos. El anciano salió de la casa y caminó por el pueblo tocando el tambor que llevaba consigo. Por cada golpe que daba al tambor salían chorros de agua cada vez más intensos hasta que el tambor explotó e inundó rápidamente el pueblo. Dicen que los gritos de la gente eran desgarradores y espeluznantes. Incapaces de controlar su curiosidad, la mujer y sus hijos cometieron el error de voltear para ver lo que estaba sucediendo e inmediatamente se convirtieron en piedra. Los pobladores aseguran que la figura en piedra de la mujer se encuentra en el pueblo Pichjapuquio, Paca.
Comentarios
Que interesante.